REPRODUCIR BUGANVILLA POR ESQUEJE (II)

EN OTOÑO, MAGNÍFICA ÉPOCA PARA HACER ESQUEJES DE BUGANVILLAS

En otoño y en primavera también, pero ahora llega el otoño así que aprovechémoslo.
Ahora es uno de los mejores  momentos para multiplicar una buganvilla mediante esquejes.
Prestad especial atención al tipo de esqueje que se vaya a elegir.
Que no sea tierno porque se nos pudrirá aparte de que se parten.
Preferiblemente leñoso, es decir, un trozo más bien grueso 
Que sea largo
Que podamos enterrar en el sustrato más de dos nudos. Cada nudo de más nos asegura el éxito de enraizamiento.
Que no le de el sol directo. Justo lo contrario que la planta. Los esquejes sufren al sol.
Quitar las hojas al esqueje, así la planta no tendrá que preocuparse de mantener vivas las hojas.
Vigilad la dirección en la que se planta el esqueje, Aquí la dirección importa.

Suerte con los esquejes. !!!

En la secuencia de fotos hay esquejes de todos los grosores, pero los que tuvieron más éxito fueron los más gruesos.

FLORACION DE LA BUGANVILLA

La floración de las boganvillas no depende tanto de nosotros como de la ubicación y las condiciones en las que se encuentre. 
En buenas condiciones florecen varias veces al año. Si la buganvilla no florece en todo un año habrá que analizar cual de los siguientes factores falla

Básicamente lo que son buenas condiciones:
-Necesita mucha tierra, mejor en un jardín y si es maceta que sea grande.
-Mucho sol.
-Temperatura cálida, no aguanta las heladas.
-Que no haya mucho viento
-Riego moderado
-En invierno se queda sin hojas, no preocuparse.

En el Mediterráneo se desarrollan perfectamente. La planta es de origen brasileño y se ha adaptado por todo el mundo fácilmente. 

COMO SABER SI VA A FLORECER
Es fácil ver que va a florecer porque cambia su forma de desarrollo, salen unos "cogollos" de hojas muy apiñadas y se puede apreciar en el color de las hojas.
Los brotes son muy tiernos, si no tenemos cuidado al manipular la planta se parten con mucha facilidad.
En la 2ª y 3ª foto se observa el apiñamiento de hojas que precede a la floración.

Las dos primeras fotos corresponden a plantas del Mediterráneo de esquejes hechos por mi y la tercera es gallega. La compré porque me gustó el color de sus flores y porque las veía por todos los sitios, realmente se me iban los ojos. Pensé que esta planta tenía que ser muy resistente y que si vivía en Galicia por descontado que también lo haría en el Mediterráneo y fue entonces cuando pensé en comprar una para Madrid y otra para Burgos. Estas dos últimas pruebas sabía eran muy arriesgadas. Ahora ya están ubicadas y solo hay que esperar a ver como pasan su primer invierno.

Cuando compré la buganvilla gallega tenía un montón de flores pero las perdió casi todas en el viaje de vuelta, mucho trajín y más de 1.000 km sin embargo parece que le ha gustado la ubicación  y ya está floreciendo.

REPRODUCCION DE UNA CONIFERA POR ESQUEJE, (THUJA, TUJA O TUYA)

¿Quien no se ha quedado contemplando un seto de coníferas?,
Yo me suelo quedar tratando de distinguir las variedades , si es aúrea o esmeralda o que...Las coníferas son unos arboles macizos, elegantes, de crecimiento lento y  en función del terreno hasta delicados. Todo eso hace que también sean caros a la hora de comprar por lo que la tentación de la reproducción está ahí rondando constantemente.
En mi caso, el éxito de enraizamiento de una conífera fue inversamente proporcional al grosor del esqueje.
Fui de mayor a menor. Al principio mis esquejes eran todos bien hermosos, gruesos restos de poda que daba pena tirarlos, estaban impecables, sólo les faltaba la raíz.... o sea, todo.
Los esquejes de tallo largo y grueso, permanecían vivos mientras el tronco les alimentaba, podían ser meses pero y finalmente se secaban.
Fui reduciendo el  calibre del esqueje hasta llegar a la mínima expresión de lo que parecía planta y por fin aquellos esquejes enraizaron en un plazo de 15 a 20 días. (Ver fotos).
Los esquejes estuvieron en los cubiletes de Leroy Merlin con fibra de coco, polvo de hormonas de enraizamieno y todos ellos en una caja de plástico transparente ( una caja reciclada de brotes de lechugas)  y por supuesto a la sombra.
En la secuencia de fotos se ven los esquejes todos vivos .  En uno de ellos se puede apreciar perfectamente la nueva raíz en el borde inferior.
Una vez visto que ya había raíces los trasplanté a nuevos tiestos para la fase de crecimiento.
Los esquejes han resultado  resistentes pero de crecimiento  lento.

REPRODUCCION DE UN OLIVO POR ESQUEJE (I)

Para todo hay que saber. La cosa más sencilla del mundo tiene una metodología. Conocerla ó no será la diferencia entre el éxito o el fracaso.

Me he ido aficionando a los olivos, me parece un árbol generoso, elegante, resistente...sólo le veo virtudes. De hecho tengo uno que está en una tinaja de vino desde hace 24 años,  no está muy lustroso porque seguramente él hubiera preferido estar en una buena tierra y se ha tenido que conformar con una tinaja y en una terraza.

No tenía ninguna intención en principio de reproducir olivos, pero un día encontré que había brotado, de "motu proprio" lo que parecía un olivo de una aceituna que había caído en la tinaja y me hizo mucha gracia, así que le puse su propio tiesto y empecé a vigilarlo de cerca mientras iba creciendo. Ilusionada con el fortuito esqueje empecé a buscar información de como reproducir olivos. 

Mi acebuche, que es el nombre que reciben los olivos silvestres,  siguió su vida y ahora mide 1,5 m. Pero yo seguía pensando en como reproducirlo sin tener que esperar a que la naturaleza intervenga, porque eso no tiene fecha. 

Había leído que el olivo necesitaba  mucha humedad para enraizar un esqueje, que había que ir pulverizando las hojas frecuentemente, que era más fácil si se mantenía la temperatura constante por ejemplo en una yogourtera......

Me  compré una yogourtera en Amazon por 13 € (pensé que arriesgaba poco). Retiré los frascos que vienen con la yogourtera y puse los cubiletes de semillero que había comprado en Leroy Merlin que los tengo hace mucho tiempo y que los voy reciclando de una operación a otra.
Puse los esquejes dentro de 16 cubiletes con la precaución de que fueran de parecida altura al recipiente porque si no, no era posible poner la tapa en la yogourtera (ver foto) y sin tapa no se mantendría bien ni la humedad ni la temperatura. Tuve el invento en marcha 4 o 5 días y los saqué de la yogourtera porque me daba la sensación de que se iban a cocer. La temperatura de la yogourtera es de unos 35ºC, aprox. A continuación  los puse en una caja de plástico transparente  hasta que enraizaron en unos 15- 20 días.

En las fotos:
La primera con los esquejes colocados en  fibra de coco.
La segunda con la tapa colocada
La tercera, en marcha con las paredes húmedas

Conclusión: de los 16 esquejes iniciales enraizaron 8 ó 9
Hice el proceso de la yogourtera a medias. De haberlo hecho correctamente, posiblemente hubiera tenido más éxito.

Esas películas que he visto tantas veces y de las que no me canso. Cuando las echan por TV normalmente me quedo pegada. Cada una de ellas tiene algo por lo que me gusta.

Ben Hur

La conquista del Oeste

La gran Evasión

La Diligencia

Las uvas de la ira

Centauros del desierto

El hombre que mató a Liberty Valance

El mayor espectáculo del mundo

Huída a medianoche

Los hermanos Marx en el Oeste

Una noche en la ópera

El apartamento

Hechizo de luna

Desayuno con diamantes

Con faldas y a lo loco

La princesa prometida

Golpe Audaz

Fuego en el cuerpo

El Manantial

Matar a un ruiseñor

El libro de la selva

Sabrina

Casablanca

Encadenados

En busca de arca perdida

Breakdown

Memorias de Africa

EL golpe

Cuando ruge la Marabunta

Quo Vadis

Arma Letal

La tentación vive arriba

Detectives de andar por casa

Fargo

Viridiana

Headhunters

Llega la primavera y mi bonsái Liquidambar brota por tercer año

Hace casi tres años que tengo este bonsái, desde julio de 2012 con motivo de la boda de mi hija, conociendo mi afición por las plantas me regalaron este precioso bonsái. En aquel momento no conocía esta variedad, liquidámbar. Solo me dijeron que se trataba de un árbol de hoja caduca y que a medida que llegara el otoño  cambiaría el color de las hojas de verde brillante, naranja, granate...segun fueran cayendo. Al estilo de las viñas vírgenes.

Al principio da un poco de miedo esto de que se quede todo el invierno sin hojas. Piensas, ¿y si no salen? Pero este bonsái ha resultado ser muy responsable y cada año alrededor de estas fechas decide revivir y saca esas  preciosas hojas verdes intensas para decirme, aquí estoy yo.

Al principio lo tuve al sol, hasta que observé que se ponían marrones las puntas de las hojas y rápidamente lo cambié a la sombra, pared norte.

El periodo de tiempo en el que cambian de color las hojas es bastante corto y la mayoría de las hojas se ponen amarillas, muy pocas granates. Todo ocurre en una semana o dos. En la imagen de arriba se muestran los cambios ocurridos este último otoño.

La secuencia es muy bonita, pero no son los cambios de color de una viña virgen o los que ocurrían en otoño en Central Park en  la película "Cuando Harry encontró a Sally", dirigida por Rob Reiner, que es un espectáculo de color, además de una comedía muy divertida y que recomiendo. Rob Reiner es uno de mis directores de cine favoritos desde que que vi "La princesa prometida".

Volviendo a mi liquidambar, es posible que si estuviera al sol consiguiera un mayor abanico de color y más duradero con la llegada del otoño. Pero no he querido probarlo precisamente por miedo a quedarme sin hojas que llegaran al otoño.

En cuanto a cuidados, pienso que es más fácil  cuidar uno de hoja caduca que uno de hoja perenne, porque en este caso cada año representa  una nueva oportunidad de vida.

Un pequeño percance:

Las dos fotos parecen iguales, pero la de la izquierda es del año pasado y otra es de este año.

Hubo un vendaval tremendo la semana pasada en Barcelona y mi invenadero voló con todo lo que había dentro arrastrando en su caida a mi bonsái. Afortunadamente, el bonsái resistió muy bien el golpe, solo se rompió el tiesto de cerámica que se partió limpiamente por la mitad. Me lo han pegado con una resina y casi no se ve por donde está roto .Por suerte, no se han estropeado las yemas que ya habían comenzando a salir.

El invernadero, sin embargo, no resistió y ya no lo tengo por lo que los experimentos los haré de otra manera a  partir de ahora.